La grandiosa actualidad de Renee de Oro, titulada “Tacna y Arica”, se estrenará hoy en los teatros Setiembre y Brasil
Un bello estudio del alma chilena, no solamente en su aspecto sincero y eminentemente nacional, sino que también en el colonizador, es el que ha hecho la señorita Renée Oro, artista que ha realizado en el extranjero importantísimas obras cinematográficas. El hecho de que aparezcan obras de esta naturaleza, no se hace solamente con el fin de la propaganda y también con el objeto de pregonar las bellezas de una ciudad y de una gran región, sino que con el horizonte de demostrar al mundo entero que los chilenos han cumplido su palabra y sus promesas en toda línea que les marcó el Tratado de Ancón.
Débese esta película a la presentación de un sinnúmero de escenarios, de campos, de villas enteras, de todas aquellas regiones que el músculo chileno ha colonizado, que el afán de cultivo y de progreso ha dado una fuerza extraordinaria de producción y que en todo momento ha vibrado la nota justiciera, el concepto de la justicia y el respeto por toda iniciativa.
Esta película lleva por título “Tacna y Arica” y allí, en aquellos territorios, se han constituido los operadores cinematográficos para filmar todas las escenas más notables e importantes que se hayan hecho en el país que anhela, mal de sus culpas, rescatar una independencia que les será funesta al ser gobernado por otros países que no supieron defenderlos.
La señorita Renée Oro ha realizado una labor admirable. Fuera del punto de discusión entre ambos países se advierten los enormes progresos que ha tenido ese valle de Tacna, triste y árido, hace poco tiempo, y que en la actualidad es feraz debido a la irrigación que ha realizado Chile. Es ésta una obra de romanos, grandiosa, que cuesta muchos millones de pesos chilenos y que será en todo momento la zona disputada por los chilenos, ya que su capital se ha entregado en este comercio.
Creemos que este film es uno de los más trascendentales que se hayan hecho hasta el presente en cuestión de cinegrafía [sic] nacional.
Vayan nuestros parabienes a la señorita Oro que ha sabido realizar una labor bella y llena de todo entusiasmo y merecedora de todo estímulo.
Un detalle que significa la importancia de esta obra es que será enviada el viernes en Washington.
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Nota: El texto ha sido transcrito respetando la ortografía que presenta el artículo original.