La noche del martes se mostró en función premiere (ayer fue el estreno simultáneo en varios cines del país) la película “El Burócrata González” en el cine Rex, con asistencia de Ministros de Estado, artistas que intervinieron en su filmación, personal técnico, el director Tito Davison, el productor Guillermo Carter y representantes de la prensa y radio.
La película, que se comenzó a filmar en las platas y cerros de Valparaíso la segunda semana de febrero del presenta ño, tiene una duración de 105 minutos y fue aprobada para menores por el Consejo de Censura Cinematográfica. Un 80 por ciento de ella fue filmado en exteriores produciendo, la presencia del equipo técnico y artistas, aglomeraciones de público, de las que no se purificó totalmente la película durante su proceso de laboratorio, realizado en México, y que duró dos meses.
La dirección de la película estuvo a cargo de Tito Davison y en los papeles principales a cargo de Manolo González, Gabriel Araya, Lucho Silva, Esmeralda Roy, Kanda Jaque, Justo Ugarte, Elena Moreno, Alejandro Lira, Jorge Sallorenzo, Emilio Gaete, Eugenio Retes, Sussy Vecky, Rosita Quintana y Cuco Sánchez (estos últimos, en calidad de artistas invitados).
Es una obra humorística que describe diversas situaciones en que se ve envuelto González, maestro que tiene un taller que repara de todo, ejecuta toda clase de trabajos, con resultados desastrosos para su clientes, Con González trabaja Picasso, maestro pitos (Gabriel Araya) y Mateluna (Lucho Silva). Los tres deben huir a Valparaíso de las iras de un cliente al que le deja la casa reducida a escombros. Hay también una novia de Manolo. (Esmeralda Roy). En las playas del puerto se encuentran con Cuco Sánchez, mexicano que añora su país y que canta unas canciones. Posteriormente regresan a Santiago y sus actividades antiguas y Manolo se ve envuelto en circunstancias que lo llevan a ocupar un cargo de funcionario público.
La película, desde un comienzo pretende criticar, con resortes humorísticos, el pesado fardo de la burocracia, tocando algunas secuencias en tono sencillo. Hay momentos bien logrados, pero algunas escenas se extienden demasiado. Igualmente se advierte en los actores el uso de recursos más teatrales que cinematográficos. Su primera parte está bien planteada, pero luego la debilidad argumental la hace caer en reiteraciones; la lentitud del desarrollo y el desgaste de los recursos cómicos termina por afectar a los espectadores.
“El Burócrata González”, sin superar el nivel medio de la producción de cine mexicano localizada en Chile, con chistes chilenos, actores y técnicos chilenos, representa otro esfuerzo de la cinematografía chilena por establecerse como industria.
En la interpretación (la personalidad de ellos como artistas conocidos en el teatro no fue alterada) destacan Manolo González, Gabriel Araya, Elena Moreno, Emilio Gaete, Lucho Silva y otros.
