• El doble proyecto irá a Hollywood.
• Se mostrará también en el Festival de Documental de Escocia.
• Una copia del trabajo del Instituto Fílmico de la U.C. fue adquirido por la Enciclopedia Británica.

LA IDEA de descubrir en cine la geografía real de los extremos más australes de nuestro extenso país partió de Rafael Sánchez, director-fundador de] Instituto Fílmico de la Universidad Católica, quien movió al núcleo de técnicos del Instituto  y consiguió el apoyo de la Armada de Chile y luego, de la Armada de los Estados Unidos. La empresa fructificó en dos documentales de 30 minutos cada uno: Operación Evangelistas y Paralelo 56. La película costó US$ 27.000, de los cuales 20.000 fueron facilitados por USA en materiales. Se hará una copia en 35 mm para mostrar en Hollywood. Una copla irá al Festival de Documentales de Escocia en carácter educacional: el Pentágono adquirió otras copias de ambos. Igual sucedió con el Smithson Institute, y la  Enciclopedia Británica lo hizo con fines de explicación y aclaración de flora, fauna y realidad de las australes reglones hasta donde llegara, con riesgo de sus vidas, el equipo de cineastas universitarios.

La operación Evangelistas duró tres meses. Embarcados en la fragata Lautaro fueron 90 días de vida a bordo en con la espera de las mejores condiciones climáticas para la filmación y con un increíble desembarco en una parte de los increíbles peñones. Se precisó unía pericia, a toda prueba, en el equipo técnico y un despliegue de valentía y resistencia para estar presente en todas las faenas del abastecimiento a la dotación del faro más austral y más importante de la región. Las cámara de Andrés Martorell y René Kocher fueron dejando objetivo y testimonio de todo, y el  padre Rafael Sánchez se mantuvo a su objetivo de ser absolutamente auténtico. El mar es explotado con inteligencia y el texto, discreto y preciso, va subrayando sin excesos lo que las imágenes revelan al ojo asombrado del espectador. La epopeya de los hombres solos en el Faro Evangelistas encuentra el tono grandioso y viril exacto y si las escenas a bordo de la Lautaro se resienten por escasa naturalidad, el desembarco de los alimentos y la cámara de René Kocher obtiene un extraño juego luminotécnico y cromático con los lentes fresneles de la cúpula de cristales existentes ya en el siglo XVIII, que multiplican la luz creando verdaderas fantasmagorías.

CHILE PARALELO 56

ESTE SEGUNDO documental, realizado en este doble proyecto por el Fílmico de la U.C., incluye un viaje por incontables islas y lugares de Magallanes,  también  a  bordo con la disciplinada y experta dotación de La Lautaro y contactos  con los últimos y deprimentes representantes de las tribus aborígenes de esas regiones. Vemos, así, a algunas familias de alacalufes y de yaganes, escuchamos algunos parlamentos casi incomprensibles, y gracias al selectivo sentido de la observación del director podemos percibir la abulia total que sume  a estos extraños ejemplares étnicos en un primitivismo desolador.

La naturaleza surge en toda su magnitud en este documental, más convencional en su estructura, pero con varios aciertos de cámara y enfoque. La flora sorprende por su variedad y por un cromatismo inesperado. La luz encuentra entre el agua y los hielos australes un papel fundamental y en el bello y desusado día solar en que filmaron los integrantes del equipo viajero, alcanza gradaciones y efectos de magia visual.

La geografía de la región surge al paso de la fragata, los hielos son rotos para dejarle camino y el espectador escucha vivir y vibrar esta parte del continente más austral del mundo.

Agustín Cardemil, el talentoso dibujante y escenista, aportó maquetas y mapas que representan un buen trabajo profesional y una larga y seria labor informativa previa.