Actriz. Su interés por el teatro nace cuando tenía poco más de quince años, luego de asistir a una función de la ya legendaria obra de Roberto Parra, La negra Ester. Según cuenta, fue en ese momento en que su madre le “pidió que estudiara teatro”. La idea no es del agrado de su padre, quien opina que Mariana tiene madera para estudiar una carrera más tradicional, como medicina, leyes o periodismo. En 1993 ingresa a la Escuela de Teatro de la Universidad Católica: es en ese entonces cuando realiza sus primeros trabajos en teatro, concretando alrededor de quince montajes en sus cinco años de carrera, hasta titularse en 1996. Su primer trabajo en cine es Monos con navaja (2000), de Stanley Gonczanski, adaptación de la obra teatral Mun-Chile. Posteriormente trabaja en los filmes Negocio redondo (2001), de Ricardo Carrasco, y La fiebre del loco (2001) de Andrés Wood. Su consagración en el cine se da con su participación en Sub terra (2003), de Marcelo Ferrari: su trabajo le hace obtener una nominación como Mejor Actriz de Cine en los premios Altazor de 2004. Mientras tanto, cimenta su carrera televisiva con sus roles en las teleseries Amores de mercado (2001) y Machos (2003), entre otras. Su gran triunfo cinematográfico se da con su papel protagónico en Cachimba (2004), de Silvio Caiozzi: además de ganar premios por Mejor Actriz en el Festival de Cine de Cartagena y en el de Cine Latinoamericano de Huelva, Cachimba recibe numerosos premios y nominaciones en distintos festivales a lo largo del mundo. Su versatilidad y su carisma natural le hacen ganar gran reconocimiento en Chile, donde mantiene una exitosa carrera en teatro y televisión.

(Jorge Román, extraído del "Diccionario del Cine Iberoamericano"; SGAE, 2011)