Director, guionista. Estudios secundarios en el Liceo Experimental Manuel de Salas, y de Ingeniería Eléctrica en la  Universidad Técnica del Estado. No completa estos últimos porque decide estudiar en la Escuela de Cine de la Universidad de Chile de Valparaíso, entre 1968 y 1970. En el 70 vive sus primeras experiencias fílmicas como ayudante en la etapa de doblaje y posproducción de El Chacal de Nahueltoro, de Miguel Littin, y como asistente de producción de Los testigos, de Charles Elsseser. Antes, en 1969, realiza el cortometraje documental Escuela Santa María de Iquique, con el que obtiene un premio en el Festival de Oberhausen (Alemania). En 1973 dirige en Televisión Nacional un taller de Cine Documental, y realiza una serie de 24 programas con temas de la realidad nacional bajo el título de  Nuestra Época. En esta actividad se encuentra cuando se produce golpe de estado de septiembre de 1973, que lo obliga a partir al exilio. Se radica en Suecia y desarrolla en ese país una labor continua como realizador de documentales, el primero de los cuales es una aguda denuncia de la dictadura militar, el corto documental ¡La canción no muere, generales! (1976), Viene enseguida el mediometraje de ficción Extraños, que gana un premjo en el festival de Karlovy Vari en 1979: Ese mismo año escribe el guión y dirige el largometraje documental Canto Libre; donde aborda el tema de la canción de América Latina. Al año siguiente realiza un nuevo mediometraje de ficción, Pilsener y empanadas, y a continuación el documental  Victor Jara vive. En los años siguientes, paralelamente a la realización de nuevos documentales, sigue estudios en el Dramatiska Institutet (Instituto de Arte Dramático) de Estocolmo, inicialmente  de Composición de la Imagen y con posterioridad de Dramaturgia en el Cine y Guión Cinematográfico, y de Dirección de Actores y Técnicas de Actuación en el Cine y la Televisión. En 1985 regresa a Chile y recomienza de inmediato su labor como documentalista, destacándose sus trabajos sobre los problemas de los exiliados que retornan a su país, en Eran unos que venían de Chile y Una vez más, mi país. En este periodo ejerce la docencia en Institutos privados en las áreas de taller de realización y guión cinematográfico, actividad que ejerce actualmente en universidades públicas y privadas. Escribe guiones, uno de los cuales, el  proyecto de largometraje La Memoria del Olvido, es seleccionado para participar en el Workshop del Sundance Institute en Estados Unidos y nominado para el International Film Award, Cinema 100 (noviembre 1995). En 1998 dirige el largometraje de ficción, El hombre que imaginaba, con guión suyo y de Gregory Cohen. Con este mismo autor, escribe y dirige La espera, cortometraje de ficción inspirado en la pieza teatral de Samuel Beckett Esperando a Godot. Fuera de varios proyectos en desarrollo como guionista y realizador, Sapiaín se desempeña en sus últimos días como profesor y coordinador de la carrera de Pedagogía en Artes con mención en Cine y TV, Teatro y Música, en la Universidad de los Lagos, en la ciudad sureña de Puerto Montt. Muere víctima de una enfermedad degenerativa.

(Luis C. Candia, extraído del "Diccionario del Cine Iberoamericano"; SGAE, 2011)