La Villa Juan Valenzuela está situada en una zona fronteriza industrial-urbana. Los niños de la población crecen rodeados de contaminación en el aire, en la tierra y en el mar. Un grupo de jóvenes universitarios, descontentos por la situación en la que viven estos niños, han levantado la Escuela Popular de Coronel, donde, a través de diferentes metodologías y juegos, todos los domingos les enseñan a los más pequeños sobre la realidad que los rodea, dándoles el apoyo emocional que no reciben en el colegio, otorgándoles un pensamiento crítico y esperando que, en un futuro, ellos logren cambiar lo que sus padres no pudieron.