La opera prima del publicista y comunicador social Nicolás Labra es definida por sus realizadores como una comedia fantástica desarrollada en dos partes o "lados", como el disco de vinilo que tiene un importante rol en esta historia que desnuda el doble estándar de ciertas personas. En el Lado A, Sensations & Emotions, se presenta a Juan Mandinga, un predicador y vendedor de objetos religiosos que en su tiempo libre visita cines eróticos y cafés de dudosa categoría, sitios frecuentados por un traficante de una droga en pulseras ("Sensations & emotions") que quiere reclutar al protagonista en su negocio, y en el intento llega a provocarle a éste una sobredosis. En el Lado B del film, Chucha la Loca, Mandinga está en su departamento escuchando a todo volumen en un disco un radioteatro de tono sexual, Chucha la Loca, cuidado con el marido, cuya transmisión termina afectando a los pintorescos vecinos.