Luis Vicentini, campeón sudamericano de box, es el protagonista de la historia de un boxeador cuya afición por el alcohol le ha impedido triunfar en su profesión. Acusado de un crimen que no cometió, huye al norte. Consigue trabajo en la mina; la ley seca y su romance con una hermosa muchacha son los artífices de su rehabilitación. Su honestidad y deseo de surgir le crean rivalidades serias, especialmente del capataz, un delincuente que se dedicaba al contrabando de licores. La animosidad del capataz le ocasiona múltiples problemas, acusaciones, nuevas huidas y persecuciones. Finalmente todo se aclara y liberado de culpas puede contraer matrimonio. (En libro "Cine mudo chileno". Eliana Jara Donoso. Santiago, 1994)