Entrevista a Carlos Nuñez, director artístico de Sanfic6

Desde sus inicios SANFIC se ha caracterizado por tener muy claro el cine que quiere mostrar, un enfoque que tiene que ver con el cine contemporáneo, con lo que se está haciendo y con lo que no llega a Chile. Este año, ¿cuáles son las obras, visitas y actividades que te tienen más entusiasmado?

-Bueno, hemos trabajado para mantener una línea, una identidad y un perfil que es básicamente lo que le da forma a un festival de cine en la medida que los años van pasando, así que estamos muy contentos por las películas que vamos a tener este año y por los invitados. En ese sentido hay muchas actividades que se van a hacer en torno al festival y, al mismo tiempo, vamos a tener cerca de 50 invitados internacionales que van a venir a presentar sus películas lo que es muy atractivo e interesante porque eso permite un diálogo directo entre público y creadores. Cuando las personas van a ver las películas a las salas de cine se encuentran directamente con los realizadores y eso genera una relación muy cercana con la audiencia chilena que va a poder apreciar películas que se verán por primera vez que se verán en Chile, y por eso es un regalo que Santiago va a tener para poder ver cine contemporáneo.

Algunos de los invitados que vienen a esta versión de SANFIC son Abel Ferrara, Isabel  Coixet, Claire Denis, todos creadores de renombre internacional, lo que pone al Festival en un lugar estelar de su historia. ¿Cómo reciben ustedes la expectativa del público frente a lo que ha alcanzado como propuesta para la ciudad?

-Yo creo que es súper importante visualizar que se ha trabajado una línea durante cinco años, siempre hemos tenido invitados -quizás no tan visibles como los que vienen este año- pero de mucha relevancia internacional y nacional en el mundo del cine. Hoy día además queremos consolidar una programación de películas que te permite ir vinculando determinados directores y cines de los distintos lugares del mundo y es fruto de los mismo, una base de cinco años de cine de mucha calidad. De alguna forma hoy día hay directores que están interesados en venir a Santiago a conocer lo que está pasando en Chile, que hoy está teniendo una fuerza muy importante a nivel internacional, la presencia chilena en festivales internacionales ha sido muy intensa durante los últimos años y eso ha ayudado a que se genere una sinergia entre el país y el resto de la cinematografía de otros lugares del mundo. Estamos en el sexto año de SANFIC y tenemos ese soporte de contenido que permite que personalidades como Claire Denis o Isabel Coixet puedan venir al país a presentar también sus películas y vincularse con la industria y el público chileno. En ese sentido, es un trabajo que se va construyendo y que va permitiendo poder traer a este tipo de directores.

Desde el 17 al 23 de agosto van a haber muchas cosas pasando, van a haber muchas salas funcionando- como el Cine Hoyts de La Reina, Parque Arauco, la Cineteca Nacional, Cinemundo Los Dominicos, Lastarria 90 y el Centro Cultural Matucana 100- pero además hay nuevamente  un esfuerzo por llevar el cine fuera de las salas…

-Sí, bueno, como todos los años la idea es tratar de acercar el cine a las distintas audiencias, a los distintos lugares de la ciudad, Santiago es una ciudad bastante grande y el objetivo es llevar películas a distintas comunas. Este año vamos a estar en seis comunas porque vamos a tener un camión que va a estar acercándose a las distintas audiencias para mostrar películas que van a estar exhibiéndose también en las salas de cine. Ese espacio se llama "SANFIC en tu comuna" y lo hemos tenido en los últimos tres o cuatro años. Por otro lado, se va a presentar un espacio nuevo que busca rememorar los años ’70 y ’80 donde las personas podían ir en auto a ver una película en una pantalla gigante. Eso se llama AUTOSANFIC y creo que se va a hacer en Lo Barnechea. También tenemos la itinerancia que siempre se hace durante la tercera semana de septiembre donde vamos con películas a distintas regiones del país. Este año vamos a ir a cuatro localidades donde se van a presentar cintas que van a estar en el festival. Es muy interesante ver como en los distintos lugares de la ciudad y del país la gente puede también participar del festival y de estas producciones.

En ese sentido, también hay una política respecto al precio de las entradas que da una señal de que es un festival abierto al que más personas pueden asistir.

-Claro, la idea es que el festival sea parte de la ciudad, sea un símbolo privilegiado de cultura que pueda ser un aporte y donde la ciudadanía pueda visualizar estas películas a un costo mínimo. Las entradas son rebajadas: $2000 general y $1000 estudiantes y tercera edad. Por lo tanto la programación es bastante diversa, nuestra idea siempre ha sido tener una oferta amplia de películas.

Atención también con otras actividades muy importantes que van a estar desarrollando. Hay mesas sobre la industria, hay otras de reflexión sobre el cine chileno, hay mesas universitarias, pero además -que quizás para los cinéfilos es lo más interesante- habrá mesas de encuentro con Abel Ferrara, Isabel Coixet y Claire Denis y con el destacadísimo crítico de la revista Variety, Robert Koehler. Todas esas actividades están abiertas pero hay que inscribirse. Cuéntanos un poquito de eso.

-Sí, es fundamental para el festival, aparte de exhibir películas, generar un entorno y un ambiente cinematográfico que implica realizar espacios de discusión, de debate, seminarios, foros, charlas, donde participan los invitados internacionales con la industria del cine chileno, por un lado, y por otro, espacios donde están presentes destacados académicos, productores y cineastas nacionales, para compartir con el público. Las inscripciones para las distintas actividades del festival van a estar abiertas desde el 5 de agosto a través del sitio web del festival  www.sanfic.com, desde donde van a poder acceder a las salas y participar de las actividades que se van a realizar en otros lados, que estarán publicados. Van a ser actividades gratuitas para que se genere un intercambio con la ciudadanía, desde el cine patrimonial, hasta charlas sobre cine contemporáneo, cine chileno, cine internacional, lo que nos va a permitir abarcar una amplia gama de temas.

Si no me equivoco, SANFIC es el único festival internacional en Chile que no tiene apoyo del Estado y que ha desarrollado una estrategia de negocios asociándose con la empresa privada. ¿Cómo han logrado poder tener una espalda financiera importante que les permite tener 50 invitados, más de cien películas, todas estas actividades y entradas accesibles, pero al mismo tiempo mantener la independencia en términos de curatoría?

-Proyectos de esta envergadura siempre hay que pensar en cómo financiarlos y nosotros hemos estado trabajando los últimos años fundamentalmente con el apoyo de la fundación CORPARTES que ha sido trascendental para el desarrollo del festival. Hoy día hemos elaborado estrategias donde el festival tiene distintos departamentos que se nutren para generar un evento que sea equilibrado. En ese sentido, efectivamente hay un concepto cinematográfico de directores de prestigio, de alta calidad, que hoy día estamos trayendo al país y la empresa privada ha participado de ese concepto. Es muy importante pensar que un país sin cultura no tiene posibilidades de desarrollarse de mejor manera y por eso es muy importante el trabajo que se ha hecho en conjunto, porque la empresa privada está involucrada con el festival, lo que nos permite pensar a largo plazo. Estamos muy contentos de poder desarrollar un festival de esa manera.

¿Y no han tenido problemas con mantener la línea editorial?

-Mira, nos ha resultado bien porque hoy día el festival tiene una línea editorial absolutamente clara que se ha ido legitimando durante los últimos años y prueba de ello son las películas que participan en el festival y los invitados que vienen a participar, que son todos de prestigio mundial. Además están los representantes de la industria nacional que cada año se involucran más. El festival tiene una identidad y esa identidad es de calidad y tiene un perfil que es importante mantener. Nosotros hemos ido viendo las maneras de cómo hacer que sea abierto al público y por eso hemos visto distintas posibilidades de que el festival tenga participación de la empresa privada que permita esto, pero al mismo tiempo manteniendo la calidad. Son fórmulas que se van trabajando y que en distintas partes del mundo se hacen. Yo creo que en Chile estamos en un momento en que hay que pensar que efectivamente la empresa privada tiene un rol fundamental que jugar en la cultura, en el cine, y a través del festival se está demostrando.

Tú tienes la envidiable misión de ir por el mundo viendo películas, escogiendo y tratando de negociar algunas de ellas para que lleguen a Chile. Y ahora no te pregunto como director artístico del festival, sino como cinéfilo, ¿qué es lo que te tiene más emocionado de SANFIC?

-Este año vimos aproximadamente 600 películas, entre todas las que llegaron postulando al festival desde distintos lugares del mundo y las que vimos en distintos festivales, en Cannes, Sundance, Berlín, Rotterdam y Tribeca. Finalmente seleccionamos 120 y de ellas, para mí, toda la retrospectiva de Claire Denis es imperdible. Es una directora muy interesante que ha realizado doce películas y ya se habla de que es una de las realizadoras fundamentales de los últimos diez o quince años en el cine contemporáneo. De ella vamos a presentar siete películas, ninguna de ellas se ha presentado antes en Chile, y me parecen imperdibles. Lo mismo con el cine de Isabel Coixet que es una directora española muy interesante que hoy día tiene un prestigio muy importante a nivel internacional. También es una retrospectiva, con cinco películas. Por otro lado está un foco que estamos haciendo de Jim Finn, un director independiente norteamericano que viene también como jurado y que va a presentar tres de sus largometrajes y nueve cortometrajes. Él es un director muy interesante, casi inclasificable porque fusiona la comedia negra con el tema político y logra plantear un discurso a través del lenguaje cinematográfico muy atractivo. El cine chileno está hoy en un momento muy interesante y por lo tanto la competencia nacional en el festival también lo está. Son primeras, segundas o terceras películas de realizadores jóvenes y otros no tan jóvenes que están planteando cosas que vale la pena ver. Por supuesto el cine francés, el cine alemán, cuyas cinematografías son muy pujantes, muy fuertes. Tenemos además un foco suizo llamado “Mosaico suizo”, una cinematografía nueva para Latinoamérica. Los suizos tienen distintas maneras de hacer cine por sus temáticas, por su financiamiento,  por su cultura misma, no hay un concepto que lo defina. La competencia internacional también está muy atractiva, el cine latinoamericano, etc.

 En www.sanfic.com está toda la programación para que se vayan organizando. ¿Las entradas van a estar disponibles desde cuándo?

-Desde cinco o diez días antes de que comience el festival, vale decir como el 8 ó 10 de agosto.