La película se centra en Tomás, un joven estudiante de bajos recursos que se ganó una beca para continuar sus estudios en Europa. El último fin de semana que pasa con su familia se rompe una alcantarilla en la casa, causando una inundación y muy mal olor. Sin dinero para los arreglos, las tensiones al interior de la familia se hacen más visibles. En este contexto, Tomás empieza a mostrar un deseo oculto hacia su hermana menor Catalina.

El orgullo que tiene la familia hacia Tomás por sus logros académicos se muestra constantemente. Y se resalta cada vez que se refieren a su hermana, como la niña con malas notas, desinteresada en la escuela, y con un problema que la tiene muy complicada. Ella no sabe cómo desenvolverse entre los suyos, ya que desconfía de ellos.

La película va adentrándose en las complejidades de las relaciones familiares que son cada vez más frágiles. El director nos muestra a través de los planos medios los problemas internos con los que cada personaje vive, en los diálogos se deja ver una constante desconfianza y distanciamiento de cada miembro respecto a su entorno. A medida que la historia avanza escuchamos a la familia referirse a Tomás como el niño perfecto, pero Carlos Leiva nos va dando pistas -desde inicio de la película- de que Tomás tiene un apego hacia su hermana poco común. El joven -que comparte la pieza con su hermana y su abuela- se sumerge en los libros de medicina para tratar de fijar su atención en algo más, y lograr así una crearse un espacio privado que no tiene físicamente. Por otro lado, su hermana, que tampoco cuenta con privacidad, no tiene pudor en vestirse o ducharse en frente de él. Lo que, si bien no justifica el deseo de Tomás, tampoco lo ayuda en su lucha interna.

A medida que la película avanza cada uno de los personajes se va sumergiendo más y más en su dolor interno logrando que el espectador empatice con esos sentimientos. El final se acerca y con ello la partida de Tomás hacia Europa. Quizás siendo esta su única liberación y la posibilidad de mejora para toda la familia.

La propuesta narrativa de El Primero de la Familia permite que cada uno de nosotros se pueda sentir identificado con la problemática de esta familia. Las dificultades económicas son tema conocido para la mayoría de las personas. Un problema no menor que, si no se puede manejar bien, puede destruir por completo a una familia. El primero de la familia es una película que nos deja reflexionando que ser el primero puede ser también una carga.