12 películas online que sirven para entender el estallido social chileno
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No son 30 pesos, son 30 años. Esta ha sido una de los principales frases que explican el estallido social que comenzó en Chile el 18 de octubre. 30 años de injusticias, de malestares barridos debajo de la alfombra de un sistema económico controlado por los privados con reglas dictadas a su favor, pisando derecho sociales básicos controlados por el mercado y en donde el Estado ha sido un mero facilitador. En medio de todo esto, los más pobres siempre han sido los más perjudicados y olvidados en discursos que hablaban siempre de un milagro económico, de crecimientos únicos y de una estabilidad política envidiable. Todo lo que hoy suena tan vacío e irreal.

¿Y el cine qué dijo al respecto en estas tres décadas? Aquí presentamos una lista con 12 películas, realizadas entre 1989 y 2018, que dieron cuenta, desde distintos ángulos, de lo que este sistema económico estaba marginando o, directamente, invisibilizando. Son películas que, tanto en la ficción como en el documental, cuentan historias sobre personajes frustrados, que se tragaban una rabia que hoy comenzó a gritar, marchar y golpear cacerolas, exigiendo ser escuchados y pidiendo un nuevo país.

Caminito al cielo (1989)

La dictadura termina, pero el modelo económico persiste, como también su Constitución. El costo: los más pobres quedan totalmente desvalidos y desamparados. Este gran documental de Sergio Navarro es capaz de adentrarse en cómo pobladores de la población La Pincoya son reflejo de un sector totalmente marginado y echados a su suerte. La respuesta de ellos es la violencia como principal forma de supervivencia, la más directa reacción a una realidad que no les ofrece mayores salidas, solo por el hecho de ser pobres. “El baile de los que sobran” se inspiró directamente en personas como ellos. Online gracias a la Cineteca Nacional de Chile.

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Caluga o menta (1990)

Los mismos marginados de Caminito al cielo protagonizan en clave ficción esta icónica película de Gonzalo Justiniano. Un peladero entre medio de unos blocks de una población de Santiago, en medio, un grupo de jóvenes tomando el calcinante sol y drogándose. Parecen arrojados al desierto, pero están en la capital de un país supuestamente en alza económica. Parece el infierno, pero es el Chile de la nueva democracia. Un inicio impactante, con una película llena de frases potentes: «Aquí desde que nacimos estamos sobrando»; «Aquí estamos los que chorrean, los que chorean y los que esperan el chorreo»; «Ahora recién se acuerdan de los locos, ahora que nos volvimos locos». Online gracias a la Cineteca Nacional de Chile.

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Chile, la memoria obstinada (1997)

Patricio Guzmán rastrea al Chile que la dictadura moldeó, uno que se empeñó en borrar todo vestigio de lo que fue la experiencia de la Unidad Popular, esa que fue retratada por él mismo en la trilogía de La batalla de Chile. Se ve a jóvenes que se sorprenden mirando estos documentales sobre los últimos días de Allende, dicen que son historias que nadie les ha contado. También Guzmán se encuentra con viejos conocidos que hablan desde el ahogo en un Chile desmemoriado, blanqueado. Un momento potente es el que está a cargo del actor Ernesto Malbrán, quien aparecía en La batalla de Chile: «Las ideologías sirven de bien poquita cosa, debemos asumir la tarea de constituirnos en imágenes vivientes, para que los jóvenes que miran para todos lados buscando de donde agarrarse, sepan que este no es un naufragio, que es una tembladera de piso, nada más». Online gracias a Ondamedia.

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Este año no hay cosecha (2000)

Diez años de gobiernos democráticos, se habla del jaguar de sudamérica, del crecimiento económico, del milagro chileno, de la estabilidad política. Pero en el fondo se acumula injusticias y se impone la idea del consumo como medida para ser alguien en la sociedad. Los niños protagonistas de este documental dirigido por Fernando Lavanderos y Gonzalo Vergara no se diferencian mucho de los de Caminito al cielo. La democracia y el milagro económico, finalmente, nunca llegó para algunos y desconfían plenamente del sistema y de los políticos. Notable resulta cuando ellos toman la cámara y el micrófono e intentan hacer un reportaje. Un gran documental. Online gracias a Fernando Lavanderos.

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Rabia (2006)

Hecha con muy pocos recursos, Rabia es de esas películas subterráneas que con poco logran captar mucho del momento y eso es solo gracias a una observación directa, auténtica y sin efectismos. Una joven busca trabajo como secretaria y se enfrenta a una serie de entrevistas de trabajo. Se cruza con sus «competidoras» en salas de espera eternas. Todas, como ella, están hace mucho buscando una oportunidad y el destino parece nunca estar de su lado. Los tiempos muertos de Rabia no son realmente muertos, acumulan ahí la frustración y, como dice su título, una rabia generacional que sólo se acumula, porque es un país que se enfrió y que sucumbió ante el individualismo y el exitismo. Si te quedaste abajo, es culpa tuya. Ante eso, cualquier vía de escape es solo criminalmente autodestructiva. Online gracias a su director, Oscar Cárdenas.

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El pejesapo (2007)

Un antes y después marca esta película dentro del cine chileno del presente siglo: fuera de todo circuito, de toda norma de producción, de toda estética en boga, logra una altura que muy pocos han alcanzado. Tan rompedora como estimulante, la historia de Daniel SS, un hombre que falla en su suicidio y comienza un divagar turbulento, es una película inquieta estética y argumentalmente, siendo así un reflejo integral de un hombre que lucha por ser visible ante un sistema que lo empuja constantemente hacia el abismo. En ese viaje parece ser muchos personajes a la vez, todos situados en la marginalidad, donde pocas veces el cine retrata con tanta espontaneidad y certeza. Al estar situada en el límite entre la ficción y el documental, su efecto es aún más impactante y removedor. Un clásico contemporáneo. Online gracias a sus autores.

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La nana (2009)

Con el paso del tiempo, La nana ha ido ganando en grosor y en certeza en cuanto al retrato social que contenía, uno muy amargo finalmente. Sin caer en el discurso evidente o en el mensaje transparente, gracias a cuotas de comedia perfectamente situados y, sobre todo, por una Catalina Saavedra en estado de gracia, la película en sí termina siendo un retrato muy claro de cómo la clase alta chilena mira a los pobres, o a sus subordinados: con paternalismo, con un cariño basado en la caridad, pero claro, con la mano firme por si quiere pasarse de la raya. La rabia contenida del personaje principal era el reflejo de un Chile que soportaba todo por una comodidad de cartón, muy precaria e indeble. Online gracias a Ondamedia.

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Perro muerto (2010)

Ganadora del Festival de Valdivia del 2010, el debut de Camilo Becerra sorprendió por construir una historia tan íntima como decidora del Chile de este siglo. Una joven, con su pequeño hijo, son empujados a dejar la casa en la que viven. En ese periplo la película rastrea su complejo presente como madre adolescente y todo lo que ese peso implica socialmente, pero a la vez, lo que es vivir en la periferia, donde menos respuesta o soluciones hay. Poseedora de una naturalidad muy bien lograda, es una película que merece mayores revisiones y que ahora queda online, gracias a su director, quien la cede a Cinechile para ser vista en este contexto. A destacar: Becerra, junto a Sofía Gómez, estrenaron el 2018 en Sanfic el filme Trastornos del sueño, que pone con más fuerza el acento en personajes aprisionados por un contexto sombrío que los inhumaniza. Una cinta tan destacable como ésta.

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Volantín cortao (2013)

Una estudiante de sicología hace la práctica en un Sename del sur de Santiago. Es de familia acomodada, pero está frustrada, su carrera no la conforma. En este trabajo conoce a Manuel, uno de esos «niños problemas» que sabe que en este centro no hay muchas soluciones. Finalmente se conectan al compartir un sentimiento (la frustración), aunque no una posición social. Las exploraciones visuales -más que argumentales- de Volantín cortao son lo mejor del filme; el cómo delinea los entornos de cada personajes, sobretodo la vida de Manuel, donde se incluyen elementos documentales muy bien tratados. También en como se preocupa de reflejar una ciudad segregada, donde los ricos y los pobres están destinadas a no conocerse. Este filme, una tesis universitaria nacida de la Universidad del Desarrollo (una de las universidades creadas por grupos ultra conservadores) fue toda una sorpresa en el Festival de Valdivia de 2013. Online gracias a Ondamedia.

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Chicago Boys (2015)

Una total revelación fue este documental que desentraña la generación de economistas que estudió en la Escuela de Economía de la Universidad de Chicago y que luego instaló, en plena dictadura y sin ningún contrapeso, el sistema neoliberal que estudiaron. Pero más allá de lo didáctico e instructivo que es, lo más impactante del documental es cómo logra que sus protagonistas hablen desenfadadamente de lo que hicieron y del país que creen que construyeron: uno tan sólido y resplandeciente como las torres de Sanhattan, desconociendo las desigualdades y las arbitrariedades de un sistema económico que le ha puesto precio prácticamente a todo, donde los que ganan siempre son los que más tienen y que no perdona a quien no puedo pagar por vivir dignamente. Online on demand, gracias a sus realizadores, Carola Fuentes y Rafael Valdeavellano.

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Aquí no ha pasado nada (2016)

Fue una película hecha desde la urgencia y la indignación frente al caso del hijo del senador Carlos Larraín, quien saliera libre tras atropellar y asesinar a un hombre mientras manejaba borracho. Pero esa urgencia no significó que resultara una denuncia simplista, todo lo contrario. Este filme de Alejandro Fernández resulta fascinante por su retrato de la juventud de clase alta: altanera, autoindulgente, endogámica, que no teme a errar porque tienen todo para enterrar el error y salir ileso. Lo peor: serán ellos quienes dirijan en rigor el país en el futuro y lo saben muy bien. Online en Netflix.

 

Mala junta (2016)

El primer largometraje de Claudia Huaiquimilla es uno de los mejores retratos juveniles del cine chileno reciente. Y lo es no solamente porque se centra en dos adolescentes descontentos con sus realidades y cuya amistad se fortalece sobre ese descontento, sino porque los sitúa muy claramente, y de forma lúcida, en un contexto (el conflicto mapuche en el sur) donde ese malestar interno se engrosa y se comprende aún más. La rabia, finalmente, es la rabia hacia una realidad que oprime, reprime y no ofrece muchas salidas a quienes viven más cerca de la base de la pirámide social. Online gracias a Ondamedia.

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