Leipzig: Paloma de Oro voló a Chile
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Los premios de Leipzig fueron el reconocimiento internacional a algo que, en Chile, se estaba gestando en forma silenciosa: el cine documental. Hace más de diez años, hubo un buen punto de partida con los cortos de Sergio Bravo; después –en gran parte por falta de presupuesto– siguió un período de escasa producción de Cine Experimental de la “U”.

19701223_ercilla_palomaoroleipzig_Foto_baja.jpgAhora, en forma casi paralela al aumento de largometrajes nacionales, nuevamente surge un cine documental (ERCILLA 1.805), más combativo y más impactante que en su etapa inicial. No hay aún conductos para que se exhiba en los cines y llegue a un público más amplio, pero varios de estos cortos han recorrido las poblaciones con las unidades de cine móvil de la “U”.

En el Festival de Documentales y Cortometrajes de Leipzig (República Democrática Alemana), el jurado internacional otorgó una de las Palomas de Oro (primer premio) al envío chileno compuesto por Venceremos (Chaskel y Ríos), Brigada Ramona Parra (Alvaro Ramírez, Samuel Carvajal, Leonardo Céspedes), y Reportaje a Lota (Diego Bonacina y José Román).

Además la Fipresci (Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica) premió, en conjunto, a Venceremos, Brigada Ramona Parra y Desnutrición Infantil (de Alvaro Ramírez).

Fue Ramírez quien viajó a Alemania para acompañar las películas en la muestra. Desde el primer momento se dio cuenta que el gran interés por Chile, producto de la situación política, se había extendido también al cine. No era difícil, por cuando varias de las películas reflejaban justamente el momento actual.

Efecto de lo anterior: fuera del cubano Santiago Alvarez, fue el único latinoamericano que contó con intérprete propio de la mañana a la noche.

Nadie le anticipó a Ramírez que los films chilenos serían premiados, fue sometido Ramírez (quien se caracteriza por su barba, su pipa y su timidez) recalcó que (1) se trataba de un movimiento cinematográfico y no de dos o tres películas de dos o tres personas, (2) que este movimiento estaba sustentado por una clara posición ideológica en lo político social y (3) que su intención básica era descubrir los valores de nuestro pueblo y ayudar a desarrollarlos.

Los premios, otorgados en forma colectiva y no a cineastas individuales, prueban que los jurados comprendieron este fenómeno, actualmente en plena gestación en el cine documental chileno.